Michael Truncale
Antes de ser juez federal, fui abogado litigante, mediador y árbitro. Como tal, aprendí la importancia de comprender que toda historia tiene dos caras. A través del proceso contencioso, la verdad emerge. Además, aprendí que las medidas correctivas (por ejemplo, veredictos y acuerdos) deben adaptarse para crear el resultado apropiado basado en los hechos y la ley. Las técnicas que aprendí como abogado, mediador y árbitro son las que utilizo como juez. Como juez, aplico el estado de derecho a los hechos de cada caso. Dejo que la ley y los hechos me guíen. Sospecho que los mismos conocimientos serían útiles para analizar los asuntos que se presentan ante la Junta de Disciplina. Por último, he aprendido que, independientemente de los méritos de las demandas o defensas, todos los participantes en el proceso deben ser tratados con dignidad y respeto.