Enmienda de la Sala 073 to D034 Support and Advocacy for Restorative Justice and a Moral Commitment to Abolition of Prisons and Policing Propuesta por Andrew Waldo

Se resuelve, con la aprobación de la Cámara de Obispos,

<Texto enmendado tal y como aparecería si se adoptara y concurriera. Vea la versión que muestra todo el texto eliminado y añadido debajo de la línea de asteriscos (******).>

Que la 81a Convención General de la Iglesia Episcopal reconozca que esta Convención afirme que Jesús proclamó la libertad para los prisioneros (Lucas 4:18) y prometió la posibilidad de justicia orientada a la restauración incluso para quienes lo asesinaron (Lucas 23:34), y por lo tanto que nuestro voto bautismal de “proclamar con la palabra y el ejemplo la buena nueva de Dios en Cristo” nos llame a proclamar el deseo de Dios de liberación para todos los que están encarcelados y de justicia real y responsabilidad que restablezca las relaciones, transforme las situaciones de daño, cree una seguridad centrada en la comunidad y apunte a la reconciliación, lo cual es la misión central de la Iglesia; y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención afirme que la reducción de la cantidad de personas encarceladas en el sistema actual de prisiones y la vigilancia policial responsable son una obligación moral y abogue por una mayor justicia en el uso del encarcelamiento y en los métodos de vigilancia policial, reconociendo que el estado actual de nuestras prisiones y vigilancia policial forman un sistema injusto de control racial y un lugar de violencia y deshumanización que no se asemeja ni trae consigo el Reino liberador y reconciliador de Dios; y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal aliente a todos los episcopales, las parroquias, las congregaciones, las diócesis y los ministerios de prisiones a participar a nivel local en programas de justicia restaurativa y transformadora, que busquen prevenir y responder al crimen y al daño de maneras creativas y no violentas más allá de las prisiones y la policía; y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención aliente a las parroquias, las congregaciones, las diócesis y los ministerios penitenciarios a aprender y enseñar sobre la reforma penitenciaria, incluida la abolición, y a defender los valores cristianos en el contexto de su propia labor en pro de la justicia social; y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención reafirme y profundice el compromiso de la Iglesia Episcopal con el fomento a los cambios en las políticas para poner fin al encarcelamiento masivo (Resolución 2015-A011) y defienda los derechos de las personas discapacitadas dentro del sistema penal (Resolución 2015-D-32), así como su oposición al confinamiento solitario (Resolución 2018-D029), las prisiones privadas (Resolución 2015-D067), las fianzas monetarias (Resolución 1973-D097), y el conducto de la escuela a la prisión (Resolución 2015-D068); y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal además ordene a la Oficina de Relaciones Gubernamentales e inste a todos los episcopales, parroquias, congregaciones y diócesis a abogar por que se hagan esfuerzos en las políticas consistentes con la meta de reformar las prisiones y el sistema policial, incluyendo reformas dirigidas a enfocar los presupuestos de la policía en otras necesidades de las comunidades, como estas políticas específicas: 

  • Apoyar políticas que reduzcan el financiamiento tradicional de los departamentos de policía e inviertan más en la policía basada en la comunidad, así como en salud mental y respuesta a las crisis. 

  • Apoyar la inversión monetaria en necesidades de la comunidad como vivienda asequible, atención médica y educación. 

  • Apoyar los esfuerzos de justicia restaurativa y transformadora del sistema penal que propicien la restitución, la rendición de cuentas y la sanación, tanto de los agresores como de las víctimas. 

  • Apoyar la calidad de vida y la rehabilitación de los presos.  

  • Apoyar las mejoras de capital de las prisiones que mejoren la calidad de vida de las personas encarceladas y apoyen los programas de educación y rehabilitación, en lugar de seguir invirtiendo en aumentar la capacidad. 

Y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal ordene además a la Oficina de Relaciones Gubernamentales e inste a todos los episcopales, las parroquias, las congregaciones y las diócesis a oponerse a las políticas que no conduzcan a la reforma de las prisiones y del sistema policial, incluyendo: 

  • Oponerse al aumento de la inversión en los presupuestos policiales para nuevas contrataciones o programas de “capacitación” policial incompatibles con estos objetivos. 

  • Oponerse a la militarización de la policía mediante la venta o el suministro de material militar por parte del gobierno federal a los departamentos de policía municipales y estatales. 

  • Oponerse a los planes gubernamentales para abrir nuevas prisiones o cárceles, incluidos los planes de instalaciones para poblaciones específicas, como los centros de detención de inmigrantes (consulte la Resolución 2022-D031). 

Y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal inste al Comité de Responsabilidad Social Corporativa y a los Ministerios Episcopales de Migración a tener en cuenta la reforma de las prisiones y el sistema policial en sus actividades de fomento y toma de decisiones. 

Y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal inste al Comité de Responsabilidad Social Corporativa y a los Ministerios Episcopales de Migración a tener en cuenta la reforma de las prisiones y el sistema policial en sus actividades de fomento y toma de decisiones. 

Que la 81ª Convención General de la Iglesia Episcopal reconozca que el testimonio moral de la Iglesia está en contra de las prácticas racialmente injustas de exclusión y castigo y en contra de nuestros sistemas actuales de prisiones y vigilancia policial que funcionan como sistemas racistas de control social y tratan a las personas que han cometido delitos como desechables; y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención se arrepienta del hecho de que la Iglesia Episcopal nunca adoptó resoluciones en las que se hicieran llamados a abolir la esclavitud en los siglos XVIII y XIX, y que se arrepienta de nuestra complicidad en la actual dependencia racialmente injusta de nuestra sociedad en el sistema policial y en las prisiones con el fin de producir seguridad para algunas personas a expensas de la vida y la dignidad de otras; y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención afirme que Jesús proclamó la libertad para los prisioneros (Lucas 4:18) y prometió la posibilidad de justicia orientada a la restauración incluso para quienes lo asesinaron (Lucas 23:34), y por lo tanto que nuestro voto bautismal de “proclamar con la palabra y el ejemplo la buena nueva de Dios en Cristo” nos llame a proclamar el deseo de Dios de liberación para todos los que están encarcelados y de justicia real y responsabilidad que restablezca las relaciones, transforme las situaciones de daño y apunte a la reconciliación, lo cual es la misión central de la Iglesia; y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención afirme que la abolición del sistema penitenciario y policial actual es una obligación moral y fomente la abolición de las prisiones y del sistema policial, reconociendo que forman un sistema injusto de control racial y un sitio de violencia y deshumanización que no se asemeja ni genera la justicia liberadora y reconciliadora de Dios; y asimismo

Se resuelve: Que esta Convención de la Iglesia Episcopal aliente a todos los episcopales, parroquias, congregaciones, diócesis y ministerios de prisiones a participar a nivel local en programas de justicia restaurativa y transformadora, los cuales busquen prevenir y responder al crimen y al daño de maneras creativas y no violentas más allá de las prisiones y el sistema policial, y que aliente a las parroquias, congregaciones, diócesis y ministerios de prisiones a aprender y enseñar sobre la abolición y a defender los valores abolicionistas dentro de los contextos de su propio trabajo en favor de la justicia social; y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención reafirme y profundice el compromiso de la Iglesia Episcopal con el fomento a los cambios en las políticas para poner fin al encarcelamiento masivo (Resolución 2015-A011) y defienda los derechos de las personas discapacitadas dentro del sistema penal (Resolución 2015-D-32), así como su oposición al confinamiento solitario (Resolución 2018-D029), las prisiones privadas (Resolución 2015-D067), las fianzas monetarias (Resolución 1973-D097), y el conducto de la escuela a la prisión (Resolución 2015-D068); y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal además ordene a la Oficina de Relaciones Gubernamentales e inste a todos los episcopales, parroquias, congregaciones y diócesis a abogar por que se hagan esfuerzos en las políticas consistentes con la meta de la abolición de las prisiones y del sistema policial, incluyendo reformas dirigidas a desinvertir de la policía y reinvertir los presupuestos de la policía en otras necesidades de las comunidades, como estas políticas específicas:

  • Apoyar los esfuerzos para cerrar prisiones y cárceles, así como las políticas que liberan a las personas encarceladas; oponerse a los planes gubernamentales para abrir nuevas prisiones o cárceles, incluidos los planes de instalaciones para poblaciones específicas, como los centros de detención de inmigrantes (consulte la Resolución 2022-D031).
  • Apoyar las políticas para reducir los presupuestos de la policía o desinvertir en el sistema policial.
  • Apoyar la inversión monetaria en necesidades comunitarias como la vivienda asequible, la atención médica y la educación, ya que la inversión en la reducción de la pobreza, la salud y la educación reduce de hecho la delincuencia y promueve la seguridad pública.
  • Apoyar los esfuerzos de justicia restaurativa y transformadora del sistema penal que propicien la restitución, la rendición de cuentas y la sanación, tanto de los agresores como de las víctimas.

Y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal ordene además a la Oficina de Relaciones Gubernamentales e inste a todos los episcopales, parroquias, congregaciones y diócesis a oponerse a las políticas de reforma que no conduzcan a la abolición de las prisiones y del sistema policial, incluyendo:

  • Oponerse al aumento de la inversión en los presupuestos policiales para nuevas contrataciones o programas de “capacitación” de la policía, ya que las fuerzas policiales más grandes y la capacitación nueva no asignan recursos hacia otras necesidades de la comunidad que abordan las causas subyacentes de la delincuencia.
  • Oponerse a la militarización de la policía y a la Sección 1033 de la NDAA, la ley federal que dispone la venta de suministros militares a los departamentos de policía.
  • Oponerse al enjuiciamiento y encarcelamiento de agentes de policía por uso excesivo de la fuerza y violaciones de los derechos civiles, ya que el enjuiciamiento de casos de gran repercusión no cambia los recursos destinados a otras necesidades de la comunidad, y sí refuerza la lógica punitiva de las prisiones y el sistema policial.
  • Oponerse a las reformas que ofrecen supuestas “alternativas” a la prisión, como la vigilancia electrónica o el arresto domiciliario, que en realidad aumentan el alcance de los sistemas de encarcelamiento y criminalización, y aumentan la cantidad de personas bajo control penitenciario.
  • Oponerse a las reformas que pretenden construir “mejores” prisiones, como por ejemplo las que se enfocan en poblaciones específicas o reemplazan las cárceles y prisiones antiguas por instalaciones más nuevas, lo cual requiere una mayor inversión en el sistema carcelario.

Y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal inste al Comité de Responsabilidad Social Corporativa y a los Ministerios Episcopales de Migración a tener en cuenta la oposición abolicionista a las prisiones y al sistema policial en sus actividades de fomento y toma de decisiones.

******<Texto modificado que se propone para la resolución, donde se muestran los cambios exactos que se están haciendo:>

Que la 81a Convención General de la Iglesia Episcopal reconozca que esta Convención afirme que Jesús proclamó la libertad para los prisioneros (Lucas 4:18) y prometió la posibilidad de justicia orientada a la restauración incluso para quienes lo asesinaron (Lucas 23:34), y por lo tanto que nuestro voto bautismal de “proclamar con la palabra y el ejemplo la buena nueva de Dios en Cristo” nos llame a proclamar el deseo de Dios de liberación para todos los que están encarcelados y de justicia real y responsabilidad que restablezca las relaciones, transforme las situaciones de daño, cree una seguridad centrada en la comunidad y apunte a la reconciliación, lo cual es la misión central de la Iglesia; y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención afirme que la reducción de la cantidad de personas encarceladas en el sistema actual de prisiones y la vigilancia policial responsable son una obligación moral y abogue por una mayor justicia en el uso del encarcelamiento y en los métodos de vigilancia policial, reconociendo que el estado actual de nuestras prisiones y vigilancia policial forman un sistema injusto de control racial y un lugar de violencia y deshumanización que no se asemeja ni trae consigo el Reino liberador y reconciliador de Dios; y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal aliente a todos los episcopales, las parroquias, las congregaciones, las diócesis y los ministerios de prisiones a participar a nivel local en programas de justicia restaurativa y transformadora, que busquen prevenir y responder al crimen y al daño de maneras creativas y no violentas más allá de las prisiones y la policía; y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención aliente a las parroquias, las congregaciones, las diócesis y los ministerios penitenciarios a aprender y enseñar sobre la reforma penitenciaria, incluida la abolición, y a defender los valores cristianos en el contexto de su propia labor en pro de la justicia social; y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención reafirme y profundice el compromiso de la Iglesia Episcopal con el fomento a los cambios en las políticas para poner fin al encarcelamiento masivo (Resolución 2015-A011) y defienda los derechos de las personas discapacitadas dentro del sistema penal (Resolución 2015-D-32), así como su oposición al confinamiento solitario (Resolución 2018-D029), las prisiones privadas (Resolución 2015-D067), las fianzas monetarias (Resolución 1973-D097), y el conducto de la escuela a la prisión (Resolución 2015-D068); y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal además ordene a la Oficina de Relaciones Gubernamentales e inste a todos los episcopales, parroquias, congregaciones y diócesis a abogar por que se hagan esfuerzos en las políticas consistentes con la meta de reformar las prisiones y el sistema policial, incluyendo reformas dirigidas a enfocar los presupuestos de la policía en otras necesidades de las comunidades, como estas políticas específicas: 

  • Apoyar políticas que reduzcan el financiamiento tradicional de los departamentos de policía e inviertan más en la policía basada en la comunidad, así como en salud mental y respuesta a las crisis. 

  • Apoyar la inversión monetaria en necesidades de la comunidad como vivienda asequible, atención médica y educación. 

  • Apoyar los esfuerzos de justicia restaurativa y transformadora del sistema penal que propicien la restitución, la rendición de cuentas y la sanación, tanto de los agresores como de las víctimas. 

  • Apoyar la calidad de vida y la rehabilitación de los presos.  

  • Apoyar las mejoras de capital de las prisiones que mejoren la calidad de vida de las personas encarceladas y apoyen los programas de educación y rehabilitación, en lugar de seguir invirtiendo en aumentar la capacidad. 

Y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal ordene además a la Oficina de Relaciones Gubernamentales e inste a todos los episcopales, las parroquias, las congregaciones y las diócesis a oponerse a las políticas que no conduzcan a la reforma de las prisiones y del sistema policial, incluyendo: 

  • Oponerse al aumento de la inversión en los presupuestos policiales para nuevas contrataciones o programas de “capacitación” policial incompatibles con estos objetivos. 

  • Oponerse a la militarización de la policía mediante la venta o el suministro de material militar por parte del gobierno federal a los departamentos de policía municipales y estatales. 

  • Oponerse a los planes gubernamentales para abrir nuevas prisiones o cárceles, incluidos los planes de instalaciones para poblaciones específicas, como los centros de detención de inmigrantes (consulte la Resolución 2022-D031). 

Y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal inste al Comité de Responsabilidad Social Corporativa y a los Ministerios Episcopales de Migración a tener en cuenta la reforma de las prisiones y el sistema policial en sus actividades de fomento y toma de decisiones. 

Y asimismo 

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal exhorte a los episcopales a animar a sus departamentos de policía locales a instituir comités consultivos ciudadanos y a participar en dichos comités donde estos existan.

Que la 81ª Convención General de la Iglesia Episcopal reconozca que el testimonio moral de la Iglesia está en contra de las prácticas racialmente injustas de exclusión y castigo y en contra de nuestros sistemas actuales de prisiones y vigilancia policial que funcionan como sistemas racistas de control social y tratan a las personas que han cometido delitos como desechables; y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención se arrepienta del hecho de que la Iglesia Episcopal nunca adoptó resoluciones en las que se hicieran llamados a abolir la esclavitud en los siglos XVIII y XIX, y que se arrepienta de nuestra complicidad en la actual dependencia racialmente injusta de nuestra sociedad en el sistema policial y en las prisiones con el fin de producir seguridad para algunas personas a expensas de la vida y la dignidad de otras; y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención afirme que Jesús proclamó la libertad para los prisioneros (Lucas 4:18) y prometió la posibilidad de justicia orientada a la restauración incluso para quienes lo asesinaron (Lucas 23:34), y por lo tanto que nuestro voto bautismal de “proclamar con la palabra y el ejemplo la buena nueva de Dios en Cristo” nos llame a proclamar el deseo de Dios de liberación para todos los que están encarcelados y de justicia real y responsabilidad que restablezca las relaciones, transforme las situaciones de daño y apunte a la reconciliación, lo cual es la misión central de la Iglesia; y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención afirme que la abolición del sistema penitenciario y policial actual es una obligación moral y fomente la abolición de las prisiones y del sistema policial, reconociendo que forman un sistema injusto de control racial y un sitio de violencia y deshumanización que no se asemeja ni genera la justicia liberadora y reconciliadora de Dios; y asimismo

Se resuelve: Que esta Convención de la Iglesia Episcopal aliente a todos los episcopales, parroquias, congregaciones, diócesis y ministerios de prisiones a participar a nivel local en programas de justicia restaurativa y transformadora, los cuales busquen prevenir y responder al crimen y al daño de maneras creativas y no violentas más allá de las prisiones y el sistema policial, y que aliente a las parroquias, congregaciones, diócesis y ministerios de prisiones a aprender y enseñar sobre la abolición y a defender los valores abolicionistas dentro de los contextos de su propio trabajo en favor de la justicia social; y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención reafirme y profundice el compromiso de la Iglesia Episcopal con el fomento a los cambios en las políticas para poner fin al encarcelamiento masivo (Resolución 2015-A011) y defienda los derechos de las personas discapacitadas dentro del sistema penal (Resolución 2015-D-32), así como su oposición al confinamiento solitario (Resolución 2018-D029), las prisiones privadas (Resolución 2015-D067), las fianzas monetarias (Resolución 1973-D097), y el conducto de la escuela a la prisión (Resolución 2015-D068); y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal además ordene a la Oficina de Relaciones Gubernamentales e inste a todos los episcopales, parroquias, congregaciones y diócesis a abogar por que se hagan esfuerzos en las políticas consistentes con la meta de la abolición de las prisiones y del sistema policial, incluyendo reformas dirigidas a desinvertir de la policía y reinvertir los presupuestos de la policía en otras necesidades de las comunidades, como estas políticas específicas:

  • Apoyar los esfuerzos para cerrar prisiones y cárceles, así como las políticas que liberan a las personas encarceladas; oponerse a los planes gubernamentales para abrir nuevas prisiones o cárceles, incluidos los planes de instalaciones para poblaciones específicas, como los centros de detención de inmigrantes (consulte la Resolución 2022-D031).
  • Apoyar las políticas para reducir los presupuestos de la policía o desinvertir en el sistema policial.
  • Apoyar la inversión monetaria en necesidades comunitarias como la vivienda asequible, la atención médica y la educación, ya que la inversión en la reducción de la pobreza, la salud y la educación reduce de hecho la delincuencia y promueve la seguridad pública.
  • Apoyar los esfuerzos de justicia restaurativa y transformadora del sistema penal que propicien la restitución, la rendición de cuentas y la sanación, tanto de los agresores como de las víctimas.

Y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal ordene además a la Oficina de Relaciones Gubernamentales e inste a todos los episcopales, parroquias, congregaciones y diócesis a oponerse a las políticas de reforma que no conduzcan a la abolición de las prisiones y del sistema policial, incluyendo:

  • Oponerse al aumento de la inversión en los presupuestos policiales para nuevas contrataciones o programas de “capacitación” de la policía, ya que las fuerzas policiales más grandes y la capacitación nueva no asignan recursos hacia otras necesidades de la comunidad que abordan las causas subyacentes de la delincuencia.
  • Oponerse a la militarización de la policía y a la Sección 1033 de la NDAA, la ley federal que dispone la venta de suministros militares a los departamentos de policía.
  • Oponerse al enjuiciamiento y encarcelamiento de agentes de policía por uso excesivo de la fuerza y violaciones de los derechos civiles, ya que el enjuiciamiento de casos de gran repercusión no cambia los recursos destinados a otras necesidades de la comunidad, y sí refuerza la lógica punitiva de las prisiones y el sistema policial.
  • Oponerse a las reformas que ofrecen supuestas “alternativas” a la prisión, como la vigilancia electrónica o el arresto domiciliario, que en realidad aumentan el alcance de los sistemas de encarcelamiento y criminalización, y aumentan la cantidad de personas bajo control penitenciario.
  • Oponerse a las reformas que pretenden construir “mejores” prisiones, como por ejemplo las que se enfocan en poblaciones específicas o reemplazan las cárceles y prisiones antiguas por instalaciones más nuevas, lo cual requiere una mayor inversión en el sistema carcelario.

Y asimismo

Se resuelve, Que esta Convención de la Iglesia Episcopal inste al Comité de Responsabilidad Social Corporativa y a los Ministerios Episcopales de Migración a tener en cuenta la oposición abolicionista a las prisiones y al sistema policial en sus actividades de fomento y toma de decisiones.